11 de junio de 2012

El Gran Rescate

España pide un rescate de hasta 100.000 millones para la banca

Guindos confirma que tanto la ayuda como las condiciones se restringirán a la banca. El FMI participará como asesor. Los fondos europeos se traspasarán al FROB a través de un crédito en condiciones "muy favorables"

El ministro defiende que las condiciones se restringirán a la banca. Confía en que la ayuda reactivará el crédito y asegura que es "bueno" para España y la eurozona

Llegó la hora y el presidente del Gobierno Mariano Rajoy sigue empeñado en transmitir sensación de "tranquilidad", de "normalidad" en medio de la tormenta. Como si no pasase gran cosa. Rajoy ha mantenido durante todo el día de hoy su agenda prevista en La Moncloa, eso sí, con escasa actividad pública y privada. Ha pasado la tarde en su despacho, con miembros de su equipo, siguiendo los acontecimientos y en línea directa con la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, que también ha estado en su propio despacho en el mismo recinto. El presidente no ha suspendido aún su viaje mañana a Polonia, en concreto a Gdansk, para asistir con los Príncipes al estreno de España en la Eurocopa de fútbol frente a Italia. Solo estaba previsto que el ministro de Economía, Luis de Guindos, diera explicaciones sobre lo ocurrido en la reunión del Eurogrupo. que terminó sobre las 18.30. De Guindos ha comparecido para dar explicaciones a las 19.30. Ha insistido en que el préstamo tendrá "condiciones muy favorables". No ha ofrecido una cifra concreta y ha asegurado que no hay urgencia por darla a conocer.

Por su parte,el ministro alemán federal de Finanzas, Wolfgang Schäuble, anunció este lunes por la mañana que la troika formada por la Comisión de la Unión Europea (UE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE) controlará la reestructuración de la banca en España.
"Habrá una troika. Se encargará de controlar con precisión que el programa se cumple", dijo Schäuble en declaraciones a la emisora pública Deutschlandfunk dos días después de la aprobación de una ayuda de hasta 100.000 millones de euros para el rescate de la banca en España.
Tras subrayar que esa labor de supervisión se limitará exclusivamente a la reestructuración de la banca, Schäuble comentó que el sector financiero español se tambalea por los problemas surgidos debido a la burbuja inmobiliaria.

Asimismo, subrayó que las medidas adoptadas el sábado por los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro tienen su base en la experiencia adquirida tras la crisis inmobiliaria en Estados Unidos. "Como lección de aquella crisis hemos aconsejado a España: debéis proporcionar a los bancos suficiente dinero lo quieran o no", explicó Schäuble ante los micrófonos de la emisora pública.

El ministro alemán afirmó el pasado sábado tras la videoconferencia del Eurogrupo que España "se encuentra en el camino correcto" para resolver sus problemas financieros. "España ha llevado a cabo desde 2008 numerosas reformas, entre ellas varias importantes en el sector bancario", dijo entonces el titular de Finanzas alemán.

Asimismo subrayó que gracias a esas reformas los principales bancos españoles han conseguido afrontar bien la crisis y se muestran estables.

Bruselas ha ofrecido esta tarde a España un programa de asistencia financiera para sus entidades de crédito. Algunos de los bancos de la cuarta economía de la eurozona serán rescatados —en realidad recibirán préstamos para que puedan recapitalizarse— porque el Gobierno no tiene capacidad para aportar la ingente cantidad de dinero que necesitan para sanear sus balances. Esta lluvia de millones tendrá reflejo en el día a día de los ciudadanos españoles. Pero, cómo le afectará el rescate en sus ahorros, impuestos o créditos. Tratamos de responder a algunas de las preguntas sobre las consecuencias del auxilio financiero.
Si tiene su dinero depositado en un banco podrá lanzar un breve suspiro de alivio. La ayuda de las instituciones europeas a las entidades financieras españolas más afectadas por la crisis supondrá un reforzamiento en su estructura de capital. De esta forma, se asegurarán los depósitos de los clientes. Además, la ayuda europea situará a las entidades financieras españolas entre las más capitalizadas del mundo. Con esta inyección de dinero el Fondo de Garantía de Depósitos refuerza su posición: garantiza 100.000 euros por cada depósito.
El Gobierno ha admitido que “el apoyo financiero” de Bruselas a las instituciones financieras españolas conllevarían condicionamientos financieros solo para las entidades que reciban ayuda. El sector descuenta que tendrá que abordar un nuevo proceso de reestructuración interna que podría conllevar el cierre de oficinas y la reducción de las plantillas.

La ayuda de hasta 100.000 millones de euros para sanear el sector financiero español elevará la presión sobre los objetivos presupuestarios de España (objetivos de déficit y deuda). El Gobierno ha negociado a cara de perro para que las condiciones que exige Bruselas a cambio del rescate se limitaran exclusivamente a la banca, pero las ayudas conllevarán nuevas medidas de consolidación fiscal. Traducido: más recortes de gastos y nuevas subidas de impuestos.
“No habrá nuevos condicionamientos macroeconómicos ni nuevos condicionamientos fiscales”, ha señalado esta tarde el ministro de Economía, Luis de Guindos. Pero los intereses del crédito facilitado por Bruselas los tendrá que pagar el Gobierno y eso elevará el déficit público, lo que comportará nuevos ajustes. Además, en sus últimas recomendaciones, Bruselas aconsejó subir la recaudación del impuesto sobre el consumo —IVA— y los vinculados al medio ambiente. Es seguro que una vez que entregue la ayuda, endurecerá su postura sobre estas condiciones. Entre ellas, está retrasar la edad de jubilación o eliminar la deducción por compra de vivienda, entre otras.

Uno de los objetivos del Gobierno al solicitar el rescate financiero pasa por inyectar dinero en el sistema. Desde el Ejecutivo esperan que pasadas unas semanas desde que las entidades financieras reciban la ayuda es previsible que comiencen a hacer circular el crédito mejorando la financiación de empresas y ciudadanos. De esta forma será más fácil que las entidades vuelvan a conceder préstamos. “La razón última. No hay otra razón, es tener entidades solventes para que puedan dar créditos a las pymes y a las familias españolas”, ha remachado Guindos

Los bancos y cajas que reciban ayuda tendrán que sanear sus balances, lastrados por activos vinculados al sector inmobiliario. Reconocerán toda la pérdida de valor de su cartera de viviendas y de los créditos y préstamos a los promotores. Traducido: se espera que rebajen el precio de los inmuebles, que no habían experimentado toda la bajada de otros países. No obstante, una de las recomendaciones de Bruselas al Gobierno consiste en la supresión de la deducción por adquisición de vivienda.